El más puro testimonio

Imagen de paciente con Nimrod quiropráctico de Pura Vida Badalona

Todo el equipo buscábamos algo, una frase, un momento, una foto que resumiera nuestro año.

Luisa, nuestra persona del año, nos dio su opinión…

en ella está reflejado nuestra pasión,

los efectos colaterales de un cuidado quiropráctico,

la esperanza de poder disfrutar de la Vida,

las lagrimas de una hija emocionada al ver a su madre haciendo las pruebas en su revisión y avances.

 

                                                       EL MÁS PURO TESTIMONIO

 

El hecho de entrar en Pura Vida Badalona fue una simple casualidad.

Vi su pizarra en la puerta y me puse a leerla. Le dije a mi marido: “esto es para mí”.

Resulta que tengo una vértebra un poco salida a causa de una caída que tuve el año pasado. Empecé en marzo en Pura Vida, y antes de comenzar, no podía hacer nada en casa.

¡Nada! ¡Ni siquiera podía poner las sábanas en la cama!

Cuando hice la primera visita, me hicieron un chequeo muy curioso. Aunque debo decir que me gustó mucho, y no sé por qué, me dieron unas sensaciones muy fuertes de que había acertado al venir a este lugar.

En la calle, apenas podía andar, recuerdo que le dije a mi marido: “Creo que hemos hecho muy bien en venir a este lugar”, y él me respondió: “Pues tú verás”.

Empecé en marzo, y no noté muchos cambios hasta bien entrado el verano.

Pero ahora estamos en noviembre, y puedo asegurarles que, desde agosto hasta hoy, he avanzado muy poco a poco, ¡pero a pasos gigantes, en zancadas!

Para mí, es como si llevara zancos, cambios en positivo. Hoy hago las comidas en casa, ya que me encanta cocinar y dejé de disfrutarlo. Hago mi cama, me ducho sola, ¡incluso camino sola! Recuerdo cómo siempre salía a la calle acompañada, buscando un banco para sentarme cada 10 minutos. ¡Ahora no! Y soy súper obediente. Cada vez que vengo a mi ajuste, vengo caminando, sin coger coche ni autobús, tal como me lo recomendó mi querido quiropráctico maravilloso.

¿Qué otras cosas he notado? Mi carácter.

Me vuelvo a reconocer como yo era antes. Ahora no es que sonría, ¡es que me hago carcajadas!

Incluso me hago listados de cosas. Hace tiempo que no hablo con Angelina, con Marta, porque son amigas mías. Y he retomado el contacto con infinidad de personas que el año pasado, al estar tan mal, no quería hablar con nadie.

En casa, mis hijas, las primeras, están embobadas de ver cómo he mejorado. Incluso me llegaron a decir: “Mamá, si algún día por lo que sea no pudieras pagártelo, por favor, dínoslo que nosotras lo haremos”, muy emocionadas.

Es el mejor dinero que he empleado.

He notado que hay unas vibraciones entre mi quiropráctico y yo maravillosas. A veces, cuando vengo, me nota tensa y sin hablar, el me pregunta: “¿Qué ha pasado aquí?” Y yo me dejo llevar por ese ser tan maravilloso, y en un pim-pam es que salgo nueva.

No puedo decir otra cosa que el mejor regalo que os podéis hacer esta Navidad es pensar en vosotros mismos. Si tenéis una ligera duda de que algo os pasa, hacer una visita que no perdéis nada y muchas posibilidades de ganar todo, vida, felicidad…

Además, el trato y la amabilidad de este equipo están enfocados solo en nosotros. Os vais a sentir muy bien, ¡y la salud merece que os queráis mucho!

Venid, probadlo…

 

Todo el equipo de Pura Vida Badalona os desea la esperanza más profunda de que tengáis una Vida feliz y plena

0 comentarios

Dejar un comentario

¿Quieres unirte a la conversación?
Siéntete libre de contribuir!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *